Para determinar la causa de la diplopía, debemos observar las circunstancias de la ocurrencia, los síntomas asociados, el contexto patológico, la edad, el perfil evolutivo de la diplopía, etc.
Estos elementos pueden guiar a una causa de diplopia.
La causa puede ser tumoral, inmune, vascular o traumática. Y la anomalía puede ser local, con daño en los músculos oculomotores o en el sistema nervioso circundante, o general, como diabetes o miastenia.
Causas neurológicas
Entre las causas neurológicas encontramos los ataques del sistema nervioso central, es decir el cerebro o la médula espinal:
- un golpe,
- un tumor,
- traumatismo craneal
- esclerosis múltiple, etc.
Y el sistema nervioso periférico, es decir los nervios craneales III, VI y IV:
- aneurisma carotídeo,
- meningioma,
- neuropatía diabética, etc.
Causas musculares
Entre las causas musculares, la más común es la miastenia. Es una rara enfermedad autoinmune que se manifiesta como debilidad muscular.
En este caso, la diplopía se puede asociar con una ptosis (párpado que cae), que aparece con el esfuerzo y desaparece en reposo. Esta diplopia es indolora.
Cuando la diplopía no está asociada a ningún otro signo y no aparece en un contexto evocador, las causas más frecuentes que se mencionan son:
- un golpe del tallo cerebral,
- esclerosis múltiple,
- un tumor,
- una miastenia, y finalmente ...
- diabetes